WILKIE COLLINS

Wilkie Collins (1824-1889)
Wilkie Collins nace el 8 de enero de 1824 en Londres, Inglaterra, en el seno de una familia acomodada. Su padre, el pintor y retratista William Collins, era un artista conocido, mientras que su madre, Harriet Dickins, era hermana del editor y escritor William Henry Dickins. Su vida y carrera estuvieron marcadas por el ambiente intelectual y artístico en el que creció, y comenzó a escribir desde joven.
Estudió en La Highbury School y, a pesar de mostrar interés por la literatura, inicialmente sigue los pasos de su padre y se inscribe en la Universidad de Cambridge, aunque no completa su formación universitaria. En su juventud, Collins se dedicó al derecho y trabajó como abogado, pero pronto abandonó esta carrera para dedicarse por completo a la escritura.
La publicación de su primera novela, Antonina (1850), no le proporcionó el éxito esperado, pero en 1851 comenzó a ganar notoriedad con su novela Basil. Sin embargo, fue con La piedra lunar (The Moonstone, 1868), que se consolidó como uno de los grandes autores de su época, al ser considerado uno de los primeros y más importantes ejemplos de la novela policial. La piedra lunar se convirtió en un referente para el desarrollo posterior de la novela de misterio, destacándose por su estructura innovadora y la creación de un detective amateur.
Otro de sus grandes logros fue La dama de blanco (The Woman in White, 1859), una novela de suspenso gótico que explora temas como la identidad, la locura y el control social, y que, al igual que La piedra lunar, se convirtió en un gran éxito popular y de crítica. Su habilidad para mezclar lo gótico con el misterio y la intriga lo hizo muy popular en su tiempo.
A pesar de su éxito literario, Collins vivió una vida complicada, marcada por problemas personales, financieros y de salud. Fue muy cercano a la escritora Charlotte Brontë, a quien consideraba una amiga y cuya muerte le afectó profundamente. Collins murió el 23 de septiembre de 1889
Curiosidades de Wilkie Collins
La relación entre Wilkie Collins y Charles Dickens es una de las más famosas y complejas del siglo XIX. Los dos se conocieron en 1851, y rápidamente establecieron una amistad que fue tanto literaria como personal. Collins, que ya era escritor, se convirtió en un colaborador cercano de Dickens, quien influyó profundamente en su carrera. Collins publicó varias novelas por entregas en revistas de Dickens, como Household Words.
Sin embargo, la relación entre los dos escritores no fue siempre idílica. Aunque compartían ideas sobre la literatura y la sociedad, sus diferencias personales y profesionales crecieron con el tiempo. Collins tuvo una relación amorosa con la mujer de Dickens, Catherine Hogarth, lo que causó tensiones entre los dos autores. Aunque nunca se sabe con certeza qué sucedió exactamente, el hecho de que Collins fuera cercano a la familia de Dickens y luego se distanciara tan bruscamente se ha interpretado como una señal de conflictos no resueltos en su amistad.
En La piedra lunar, Collins no solo introdujo el personaje de un detective aficionado, sino que también se considera que innovó en muchos de los aspectos que luego serían fundamentales para las novelas de detectives modernas. El protagonista, Franklin Blake, es un detective amateur que va reconstruyendo los sucesos a través de entrevistas con diversos testigos, un recurso narrativo que no solo fue innovador, sino que anticipó las investigaciones meticulosas que más tarde serían la norma en la novela policiaca.
Lo interesante de La piedra lunar es que Collins subvirtió las convenciones de los géneros góticos y de misterio, añadiendo una narrativa múltiple desde distintas perspectivas de personajes. En lugar de seguir a un detective profesional, la trama se va desentrañando a través de varios puntos de vista, lo que crea una atmósfera de misterio y confusión. Esto ha influido directamente en escritores como Arthur Conan Doyle y su célebre detective Sherlock Holmes.
Wilkie Collins nunca se casó, pero tuvo varias relaciones amorosas, la más conocida fue con Caroline Graves, una mujer con la que vivió durante años, pero a la que nunca le ofreció un matrimonio formal. Collins prefería una vida sin las convenciones del matrimonio, y vivió con Graves en una especie de «relación libre», lo que en su tiempo fue considerado un escándalo. La relación fue algo inusual para la época, y los contemporáneos de Collins se sorprendieron de su estilo de vida.
Además de sus problemas amorosos, Collins padeció de graves problemas de salud. Durante varios años sufrió ataques de gota y otros problemas físicos, lo que le dificultaba mucho la escritura y lo llevó a una vida de constantes dolores. Estos problemas de salud también influyeron en la forma en que veía la vida y la muerte, temas que reflejó en su obra literaria.
Aunque Collins es más conocido por sus novelas de misterio y suspenso, también fue un escritor comprometido con las cuestiones sociales de su tiempo. En sus obras, especialmente en La dama de blanco y El cuaderno rojo (The Red Notebook), abordó las desigualdades de clase y los problemas de la mujer en la sociedad victoriana. Sus personajes a menudo luchan contra un sistema social injusto que los explota o los margina.
Además, Collins también estaba profundamente preocupado por la injusticia social y la corrupción. Era un defensor del cambio social y apoyaba una visión progresista en cuanto a los derechos de las mujeres y la reforma social. Estas inquietudes se reflejaban no solo en sus escritos, sino también en sus interacciones con otros escritores, como George Eliot, con quien mantuvo un profundo respeto por su activismo social.
Collins no solo fue escritor de novelas, sino también un autor prolífico de obras de teatro. De hecho, escribió más de 20 obras de teatro, algunas de las cuales fueron representadas con gran éxito en Londres. Entre ellas destaca The Frozen Deep (1856), que fue dirigida por Dickens y protagonizada por él mismo. Collins mostró un profundo interés en el teatro y las artes escénicas, y sus obras teatrales a menudo trataban sobre la moralidad, la tragedia y la psicología humana, en línea con sus novelas.
A pesar de su éxito literario, los últimos años de la vida de Wilkie Collins estuvieron marcados por el deterioro físico y la fatiga. El escritor murió a los 65 años debido a complicaciones derivadas de la gota y otros problemas de salud. A pesar de ello, dejó un legado literario duradero y sigue siendo considerado uno de los grandes maestros de la novela de misterio y detectivesca. Su obra, especialmente La piedra lunar, ha influido a generaciones de escritores y sigue siendo un referente en el género.
OBRAS
Basada en un hecho real y llevada al cine en numerosas ocasiones, La mujer de blanco, con su trepidante ritmo narrativo, mezcla de forma magistral suspense, misterio y melodrama. Esta deliciosa obra, considerada como precursora del género policíaco y que inspiró el personaje de Sherlock Holmes, se ha convertido
***Recuerda que esta página no hace apología de ninguna religión y que tan solo recomendamos libros por su contenido histórico y cultural.
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