LOU GUANZHONG

Luo Guanzhong (1330 – 1400)

Luo Guanzhong es uno de los pilares fundacionales de la narrativa china. Su nombre ha quedado indisolublemente asociado a una de las obras maestras más vastas y trascendentes de la literatura universal: El Romance de los Tres Reinos (Sanguo Yanyi), novela histórica que mezcla hechos reales con elementos legendarios para narrar el colapso de la dinastía Han y la lucha de poder entre los reinos de Wei, Shu y Wu durante el siglo III.

Nacido probablemente en la provincia de Shanxi o en el entorno de la región de Taiyuan, su vida transcurre en los años finales de la dinastía Yuan y los inicios de la dinastía Ming, una época marcada por el caos político, las rebeliones campesinas y la transición del poder mongol a una restauración de dominio han. Este trasfondo de convulsión social explica, en parte, su fascinación por los ciclos históricos de ascenso y decadencia, así como su aguda percepción de la psicología del poder.

Luo fue más que un simple narrador: fue un compendista y reimaginador de la historia nacional. Su obra mayor, escrita en lengua vernácula (baihua), fusiona registros cronísticos, dramas populares y leyendas orales. Aunque probablemente fue escrita en colaboración (se discute la participación de otros autores como Guanzhong y la influencia posterior de Mao Zonggang en su edición), la versión atribuida a Luo es la que estableció el canon. La novela no solo reconstruye los hechos históricos, sino que los dramatiza con personajes inolvidables: el astuto Zhuge Liang, el noble Liu Bei, el impetuoso Guan Yu, el ambicioso Cao Cao. Todos ellos encarnan valores, dilemas éticos y estrategias de poder que siguen resonando.

Además de El Romance de los Tres Reinos, a Luo se le atribuyen otras obras, como El ladrón del manto púrpura (Pingyaozhuan) y la posible coautoría de La marginación de la orilla del agua (Shuihu zhuan), otra de las grandes novelas chinas. Sin embargo, su legado está inseparablemente unido al universo heroico, moral y político de los Tres Reinos.

Luo Guanzhong fue, en última instancia, un arquitecto de la memoria cultural china. Convirtió la historia en épica, los documentos en drama, y los conflictos de un pasado turbulento en un espejo de la condición humana.

Curiosidades de Luo Guanzhong

Aunque El Romance de los Tres Reinos se escribió en lengua vernácula para ser accesible al pueblo, Luo Guanzhong tenía una erudición sólida en los clásicos confucianos, taoístas y militares. La novela está plagada de citas, referencias y estrategias derivadas de obras como el Clásico de los cambios (Yijing), el Arte de la guerra de Sunzi y los Anales de los Tres Reinos de Chen Shou. Luo tejió con maestría esta red de erudición dentro de un relato lleno de acción, intriga y emoción. El resultado fue una epopeya que satisfacía tanto al lector culto como al iletrado, y por ello alcanzó un estatus universal. Su capacidad para combinar lo culto y lo popular lo convierte en precursor de la novela moderna china.

Una de las decisiones narrativas más influyentes de Luo fue presentar a Cao Cao, señor de Wei, como un villano de inteligencia brillante pero de moral dudosa. Aunque en los registros históricos era considerado un estadista eficaz, Luo le otorgó el papel del antihéroe: cruel, manipulador y despiadado, capaz de justificar su pragmatismo con la frase:
“Prefiero traicionar al mundo antes que permitir que el mundo me traicione.”
Este retrato tuvo un impacto duradero en la cultura china. Durante siglos, el nombre de Cao Cao fue sinónimo de astucia perversa, y su figura ha dado lugar a incontables reinterpretaciones. Sin embargo, en tiempos modernos, muchos críticos han reivindicado su talento político, lo que demuestra la ambigüedad moral que Luo supo imprimir incluso en sus “villanos”.

Aunque El Romance de los Tres Reinos transcurre en el siglo III, muchos estudiosos coinciden en que Luo proyectó sobre la novela las tensiones de su propio tiempo. Durante la caída de la dinastía Yuan, China estaba dividida, plagada de ejércitos rebeldes, traiciones palaciegas y ambiciones dinásticas. Luo, al revivir el colapso de los Han, reflexionaba también sobre su presente, y probablemente sugería advertencias al naciente régimen Ming. En ese sentido, la novela es a la vez documento histórico, ficción épica y comentario político velado.

Durante siglos, se ha debatido si Luo Guanzhong colaboró con otro gigante de la novela clásica, Shi Nai’an, autor de La orilla del agua. Algunos sostienen que Shi fue mentor de Luo, otros que compartieron manuscritos o escribieron en colaboración. Incluso hay quienes piensan que Luo escribió parte de Shuihu zhuan y que el nombre de Shi es un seudónimo. Aunque no hay prueba definitiva, esta ambigüedad ha alimentado el aura mítica de ambos. La posibilidad de una dupla literaria anticipa prácticas modernas de escritura colaborativa, y hace pensar en un “círculo narrativo” informal de los siglos XIII-XIV.

El Romance de los Tres Reinos no fue solo una novela: fue también un manual de estrategia, ética política y psicología del poder. Generales como Mao Zedong o Lin Biao lo leyeron como libro de cabecera, extrayendo lecciones de sus batallas, emboscadas y discursos. Sus escenas han sido adaptadas en teatro, ópera, televisión y cine decenas de veces. La figura de Zhuge Liang, estratega iluminado, se convirtió en símbolo de la inteligencia superior; sus “siete capturas del rey Meng Huo” o su creación de la “táctica de la ciudad vacía” son lecciones inmortales de disuasión. En Japón, Corea y Vietnam, la novela ha sido igualmente influyente. Luo Guanzhong, sin buscarlo, escribió un texto que atraviesa siglos y fronteras como manual de sagacidad humana.

OBRAS

Guerras interminables, acción a raudales, intrigas palaciegas y numerosos personajes que abarcan desde un simple carnicero hasta la aristocracia más refinada. Hablamos del romance de los Tres Reinos, una de las cuatro novelas clásicas chinas. Escrito hace más de cuatrocientos años, en él se narra la feroz guerra civil que siguió a la caída de la dinastía Han (220 d.C).Descubre el ascenso al poder del tirano en el primer volumen de la saga.

*Literatura Diderot recomienda libros por su valor cultural y divulgativo, sin alinearse con ideologías o religiones. Cada recomendación se basa en obras relevantes para el autor analizado.*

La batalla del Acantilado Rojo es uno de los momentos más dramáticos de la historia. Una victoria del Primer Ministro implicará el fin de la contienda y seguramente el inicio de una nueva dinastía. Pero, antes, Cao Cao deberá conjurar los presagios que anuncian la derrota.

*Literatura Diderot recomienda libros por su valor cultural y divulgativo, sin alinearse con ideologías o religiones. Cada recomendación se basa en obras relevantes para el autor analizado.*