ANDRÉ GUIDE

André Guide (1869-1951)

André Paul Guillaume Gide nació el 22 de noviembre de 1869 en París, en el seno de una familia protestante burguesa, culta y estricta. Su padre era profesor de Derecho en la Sorbona y su madre, de carácter profundamente religioso, ejerció una influencia poderosa en la formación del joven André. Su infancia estuvo marcada por el rigor moral y la represión emocional, factores que generarían en él una temprana conciencia de su diferencia, de su inquietud interior y de su búsqueda constante de autenticidad.

Aquejado de una salud frágil y dotado de una sensibilidad extrema, fue educado en casa durante años, antes de pasar por varios liceos, entre ellos el prestigioso Liceo Henri-IV. Desde muy joven se inclinó hacia la escritura, influido por autores como Goethe, Montaigne y Baudelaire, y publicó su primer libro, Los cuadernos de André Walter, a los 21 años, ya bajo un tono confesional y simbólico. Muy pronto quedó claro que su obra oscilaría entre la introspección espiritual, la provocación moral y el deseo de romper las convenciones literarias y sociales.

Gide se casó en 1895 con su prima Madeleine Rondeaux, a quien amó profundamente pero con quien no tuvo vida conyugal, debido en parte a su homosexualidad, que no terminaría de asumir públicamente hasta muchos años después. Su vida afectiva fue compleja y a menudo contradictoria: buscó la redención moral mientras se entregaba a pasiones contradictorias, especialmente en sus viajes por el norte de África, donde mantuvo relaciones con jóvenes muchachos. Este conflicto entre el deber y el deseo, entre el dogma y la libertad, fue el núcleo temático de buena parte de su obra.

Obras como El inmoralista (1902), La puerta estrecha (1909), Los monederos falsos (1925) o su Diario —que escribió durante casi sesenta años— revelan su voluntad de examinar su vida con una mirada sin concesiones. Gide fue uno de los primeros escritores modernos que abordó la homosexualidad sin disfraz ni condena, en un tono personal y filosófico, desafiando la moral burguesa de su tiempo.

A lo largo de su vida fue un gran viajero: conoció África, Rusia, el Congo, Palestina y Estados Unidos. A su regreso del Congo, escribió Viaje al Congo y Regreso del Chad, donde denunció el colonialismo francés, escandalizando a muchos de sus compatriotas. También fue, durante un tiempo, simpatizante del comunismo, pero rompió con la URSS tras un viaje en 1936, que lo decepcionó profundamente y cristalizó en el libro Regreso de la URSS, una denuncia del totalitarismo estalinista.

Recibió el Premio Nobel de Literatura en 1947 por su «penetrante análisis psicológico» y su «amor apasionado por la verdad». Murió en París el 19 de febrero de 1951, dejando tras de sí una obra de búsqueda, de lucidez moral y de inconformismo que aún hoy interpela a quienes se atreven a vivir sin máscaras.

Curiosidades de André Guide

Su matrimonio con Madeleine, que nunca se consumó, marcó profundamente su obra. Gide la amó con devoción casi mística, pero ella destruyó toda su correspondencia tras descubrir su homosexualidad. Tras su muerte, Gide escribió el Diario de Madeleine, una obra dolorosa en la que reconstruye su vida juntos.
En 1925, durante un viaje por África ecuatorial, Gide quedó horrorizado por la brutalidad del sistema colonial. Lo denunció en Viaje al Congo y Regreso del Chad, adelantándose varias décadas al discurso anticolonialista. Esta actitud le valió tanto admiración como enemistades en Francia.
Gide conoció a Wilde en Argel en 1895, en un momento crucial de su vida. Wilde le habló sin tapujos de su visión del amor entre hombres, y esa conversación —que Gide relató en su Diario— fue un punto de inflexión para él. Años después, admitió que Wilde “le había salvado del autoengaño”.
Sartre y Camus lo admiraban profundamente. Camus llegó a llamarlo “el hombre más libre de su época”. Sin embargo, con el tiempo, Gide criticó el dogmatismo del existencialismo y rompió con la intelectualidad comunista, alejándose de sus discípulos.
Publicada en 1925, Los monederos falsos rompe con las convenciones narrativas del siglo XIX. La novela incluye una “novela dentro de la novela”, múltiples puntos de vista y reflexiones metaliterarias. Su estructura influiría posteriormente en escritores como Alain Robbe-Grillet y Claude Simon.
En 1952, poco después de su muerte, el Vaticano incluyó todos los libros de Gide en el Index Librorum Prohibitorum, acusándolo de “corromper la juventud” y “atacar la moral cristiana”. Gide consideró siempre la moral religiosa como una cárcel que había que abrir desde dentro.
El Journal, que comenzó en 1889 y mantuvo casi hasta su muerte, es una de las introspecciones más honestas y detalladas del siglo XX. Mezcla notas literarias, pasajes íntimos, confesiones, autocríticas, viajes, amistades y rupturas, en un documento excepcional de autoexploración.
Gide era un gran melómano. Adoraba a Mozart, Bach y Beethoven, y tocaba el piano con habilidad. Solía decir que la música le proporcionaba un placer más puro que la literatura, porque lo liberaba de su necesidad constante de comprenderlo todo.

OBRAS

André Gide (1869-1951) forma parte de un grupo de escritores que intentan profundizar en el conocimiento del hombre y en el análisis de su subconsciente. Gide es el individualista a ultranza, el novelista del yo, que indaga en su propia personalidad. De su amistad con Oscar Wilde aprendió que los instintos son la única verdad del ser humano. «El inmoralista» es una novela autobiográfica.

*Literatura Diderot recomienda libros por su valor cultural y divulgativo, sin alinearse con ideologías o religiones. Cada recomendación se basa en obras relevantes para el autor analizado.*