JOSÉ SARAMAGO
José Saramago (1922-2010)
José Saramago nació el 16 de noviembre de 1922 en Azinhaga, un pequeño pueblo en el centro de Portugal, y se convirtió en uno de los escritores más influyentes y originales de la literatura contemporánea. Su estilo único, caracterizado por oraciones largas, parrafadas sin puntuación clara y un enfoque filosófico de la narrativa, le permitió ganar el Premio Nobel de Literatura en 1998. Saramago vivió la mayor parte de su vida en Lisboa, pero su obra está profundamente impregnada de su identidad portuguesa, de su historia y de su lucha contra la opresión.
Antes de convertirse en escritor a tiempo completo, Saramago trabajó en diversos oficios, incluyendo editor, traductor y periodista. Durante los años 1960 y 1970, tuvo una carrera literaria menos destacada, con varias obras que no lograron gran éxito. No fue sino hasta la publicación de Memorial del convento (1982), una novela histórica que explora la vida en Portugal en el siglo XVIII, que Saramago comenzó a recibir reconocimiento. Sin embargo, fue con la publicación de Ensayo sobre la ceguera (1995) que alcanzó fama internacional.
La obra de Saramago se caracteriza por su crítica a las estructuras de poder, tanto políticas como religiosas. Sus libros a menudo exploran temas como la memoria, la muerte, la soledad, la moralidad, la libertad y la justicia social. Saramago poseía una profunda desconfianza hacia los gobiernos y las instituciones religiosas, lo que se refleja en sus escritos, que invitan a una reflexión sobre el papel de la humanidad en un mundo marcado por la injusticia y la desigualdad.
A lo largo de su vida, Saramago también fue un hombre de fuertes convicciones políticas. Era un crítico abierto de la política de su país y del papel de la Iglesia en la sociedad portuguesa, lo que le valió la desaprobación de algunos sectores conservadores. A pesar de su éxito literario, Saramago nunca buscó la fama ni la gloria, y mantuvo siempre una postura humilde frente a su carrera. Vivió sus últimos años en Lanzarote, una isla en Canarias, donde murió el 18 de junio de 2010, a los 87 años.
Curiosidades de Saramago
Una de las curiosidades más conocidas sobre Saramago es el escándalo que generó la publicación de El evangelio según Jesucristo (1991). La novela, que reimagina la vida de Jesús desde una perspectiva más humana y cuestiona la divinidad de Cristo, fue considerada blasfema por muchos sectores de la sociedad portuguesa, incluida la Iglesia Católica. El libro fue rechazado en Portugal por varios editores y la editorial que finalmente lo publicó se enfrentó a una serie de críticas. La controversia llegó a tal punto que el gobierno portugués, bajo el liderazgo del presidente Mário Soares, no permitió que la novela fuera presentada como la propuesta oficial de Portugal para el Premio Literario Europeo. La crítica hacia Saramago fue feroz, y muchos lo acusaron de falta de respeto hacia la religión. A pesar de la controversia, la novela fue un éxito internacional y consolidó a Saramago como un escritor de renombre mundial.
Ensayo sobre la ceguera (1995) es probablemente la obra más famosa de Saramago, y en ella utiliza la metáfora de una epidemia de ceguera repentina que afecta a toda la población para explorar las fallas de la sociedad moderna. Sin embargo, lo que muchos no saben es que Saramago escribió la novela inspirándose en una sensación de impotencia ante los problemas sociales y políticos del mundo, especialmente durante la Guerra Fría y los conflictos internacionales. La ceguera colectiva es una metáfora de la indiferencia humana ante la injusticia y la opresión, una ceguera moral que, según Saramago, caracterizaba la sociedad de su tiempo. La novela no solo es una crítica a la alienación en la sociedad contemporánea, sino también una reflexión sobre la fragilidad de las estructuras sociales. La novela se convirtió en un éxito internacional y fue adaptada al cine en 2008 por Fernando Meirelles.
Una de las historias más conmovedoras de la vida de Saramago es su relación con la periodista Pilar del Río. Ambos se conocieron en 1986, cuando ella lo entrevistó para un periódico, y su relación fue creciendo con el tiempo. A pesar de que Saramago ya tenía más de 60 años en ese momento, su amor por Pilar fue profundo y transformador. De hecho, Pilar se convirtió en su traductora oficial al español y fue su compañera incondicional en los últimos años de su vida. Saramago dedicó varios de sus libros a ella, y su amor tardío es una de las facetas más personales y entrañables del autor. En su libro La caverna (2000), por ejemplo, la relación entre los personajes también refleja las búsquedas emocionales y existenciales propias de la madurez. El amor y el arte de vivir en los «últimos años» fue una de las grandes obsesiones de Saramago, quien veía la vida con una mezcla de poesía y desesperanza.
Aunque Saramago es reconocido hoy como un escritor de una maestría única, sus primeros años como escritor fueron muy difíciles. De hecho, Saramago nunca asistió a una universidad y fue en gran parte autodidacta. Durante su juventud, se dedicó a trabajos de oficina y como periodista, pero nunca dejó de escribir. Sin embargo, sus primeros intentos como escritor fueron un fracaso y no fue hasta los 40 años que publicó su primer libro de poesía, El año de la muerte de Ricardo Reis (1984), que comenzó a recibir atención. Saramago enfrentó constantes rechazos en su carrera literaria, lo que lo llevó a pensar en dejar la escritura. Fue la publicación de Memorial del convento en 1982 lo que finalmente le otorgó el reconocimiento, pero su éxito llegó tarde, cuando ya tenía más de 60 años. Este comienzo tardío le dio una perspectiva única sobre el valor del esfuerzo y la perseverancia.
El estilo narrativo de Saramago es inconfundible, caracterizado por oraciones largas, sin puntuación clara y con una estructura que a menudo confunde al lector. Este estilo no es casualidad, sino una elección deliberada de Saramago para enfatizar el flujo de conciencia y la interconexión de los pensamientos humanos. En entrevistas, Saramago explicó que veía las pausas, las comas y los puntos como «trampas» que limitaban el flujo natural de las ideas. Para él, las pausas innecesarias interrumpían la continuidad del pensamiento y la lectura. Aunque este estilo fue criticado por algunos lectores, muchos lo consideraron una de sus mayores virtudes, ya que introdujo una nueva forma de escribir que desafiaba las normas tradicionales de la narrativa.
OBRAS
Un hombre parado ante un semáforo en rojo se queda ciego súbitamente. Es el primer caso de una «ceguera blanca» que se expande de manera fulminante. Internados en cuarentena o perdidos en la ciudad, los ciegos tendrán que enfrentarse con lo más primitivo en la naturaleza humana: la voluntad de sobrevivir a cualquier precio.
*Literatura Diderot recomienda libros por su valor cultural y divulgativo, sin alinearse con ideologías o religiones. Cada recomendación se basa en obras relevantes para el autor analizado.*
Durante las elecciones municipales de una ciudad sin nombre, la mayoría de sus habitantes decide de forma espontánea ejercer su derecho al voto de una manera inesperada. El gobierno teme que ese gesto revolucionario ―capaz de socavar los cimientos de una democracia que tal vez no sea lo que dice ser― propicie su caída, de ahí que lo presente como producto de una conjura anarquista internacional o de grupos extremistas desconocidos. Las cloacas del poder se ponen en marcha: los culpables tienen que ser eliminados. Y si no se hallan, se inventan.
*Literatura Diderot recomienda libros por su valor cultural y divulgativo, sin alinearse con ideologías o religiones. Cada recomendación se basa en obras relevantes para el autor analizado.*
¿Qué sucede cuando Tertuliano Máximo Afonso descubre a los treinta y ocho años que en su ciudad vive un individuo que es su copia exacta y con el que no le une ningún vínculo de sangre? Ése es el interrogante que Saramago, explorando de nuevo las profundidades del alma, plantea en El hombre duplicado.
¿Cómo saber quiénes somos? ¿En qué consiste la identidad? ¿Qué nos define como personas individuales y únicas? ¿Podemos asumir que nuestra voz, nuestros rasgos, hasta la mínima marca distintiva, se repitan en otra persona? ¿Podríamos intercambiarnos con nuestro doble sin que nuestros allegados lo percibiesen?
*Literatura Diderot recomienda libros por su valor cultural y divulgativo, sin alinearse con ideologías o religiones. Cada recomendación se basa en obras relevantes para el autor analizado.*
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*Literatura Diderot recomienda libros por su valor cultural y divulgativo, sin alinearse con ideologías o religiones. Cada recomendación se basa en obras relevantes para el autor analizado.*
¿Quién es este Dios, primero hebraico y ahora cristiano, que quiere la sangre, la muerte, para que sea restablecido el equilibrio de un mundo en el que sólo imperan sus leyes? ¿Cómo puede la nueva ley ser ley de Amor si aún pesa sobre el ser humano la condenación eterna? ¿Cómo puede éste creerse una criatura divina digna de la inmortalidad si debe someterse a una ley de terror que preexiste y es exterior a él?
*Literatura Diderot recomienda libros por su valor cultural y divulgativo, sin alinearse con ideologías o religiones. Cada recomendación se basa en obras relevantes para el autor analizado.*
